Escribir

A pesar de los discursos pro-tecnologías, internet y mundos virtuales, la escritura sigue siendo necesaria. Sin ella sería imposible la existencia de blogs, de páginas de internet, y así podríamos seguir con la lista.

Con frecuencia solemos escuchar la sentencia de muerte del libro de papel junto a predicciones sobre el mundo digitalizado que nos espera.

Defensores y detractores se encuentran en una discusión que se plantea desde hace años. Lo cierto es que las nuevas tecnologías conviven con las viejas, y seguiran estando juntas por mucho tiempo.

Entre estas viejas tecnologías está la escritura que sobrevive y sobrevivirá a cualquier sentencia.

Creo no exagerar si afirmo que la escritura es imprescindible para nuestra vida social y laboral. Un curriculum vitae mal redactado puede llevar a quedar afuera de una convocotaria laboral. Un e-mail confusamente redactado puede generar malos entendidos.

Dudas, enojos, alegría, amabilidad pueden ser expresados a través de la escritura. Y eso es lo maravilloso que tiene la palabra. La posibilidad de expandir sentidos, renovarlos, recrearlos en cada uso que se hace de ella.

Estas reflexiones nacen después de terminar mi primer libro de cuentos. Ahora sé que no podría vivir sin escribir.